La universidad como pilar del futuro Eva Romero se refirió a la marcha como un acto de solidaridad con el futuro del país. "Sin universidad, sin una educación de calidad, ¿a dónde vamos a ir a parar? Al tacho", declaró, enfatizando la necesidad de defender la educación pública para garantizar un porvenir. La dirigente destacó la presencia de personas de todas las edades en la movilización, lo que demuestra un amplio apoyo de la sociedad a esta causa. La marcha, que se replicó en todo el país, busca visibilizar la crisis presupuestaria que atraviesan las casas de altos estudios y la urgente necesidad de financiamiento.

La defensa de una identidad nacional Silvana Lagraña calificó la movilización como un "proceso histórico" que "da cuenta una vez más que la sociedad argentina pone un límite a los atropellos". Para la exlegisladora, la educación y la salud públicas forman parte de la identidad de Argentina. Además, Lagraña no solo se centró en la situación presupuestaria de las universidades, sino que también hizo hincapié en el legítimo reclamo de los docentes y no docentes, ya que el 50% de sus salarios están por debajo de la línea de pobreza.

Movilidad social y oportunidad para todos Lagraña destacó el rol fundamental de la universidad pública como motor de la movilidad social ascendente. Mencionó que en la región, el 50% de los estudiantes son los primeros de sus familias en acceder a la educación superior. Esta posibilidad de crecer y desarrollarse a través de la educación es lo que, según la exlegisladora, representa la esencia de la universidad pública en el país y justifica la multitudinaria convocatoria de la marcha.